martes, 20 de noviembre de 2018

Benito Taibo / Persona normal / PNSL



¡Qué aburrido hubiera sido ser normal! Éste que soy confiesa que ha vivido, y que encarrilado hacia los cincuenta, confiesa también que no ha sido una persona normal. ¿Y qué diantres es una "persona normal"? Las personas que gozan de ese adjetivo son aquellas que siguen las normas, que tienen conductas o acciones "correctas". Luego, ¿qué es lo correcto? Se aceptan definiciones.

En lo personal, tengo el privilegio de contar con tíos (presentes y ausentes) parecidos al Tío Paco, uno de los protagonistas de la aventura narrada chingonamente por Benito Taibo. Tuve una educación académica, pero también una educación sentimental donde mis tíos Chepe, Oscarín "El Furibundo", Quincho y Carlitos (mi padrino) me compartieron consejos, anécdotas, revistas, libros, arte, música, fotos, viajes, y demás artilugios que me brindaron emociones que rara vez hallé en las escuelas.



Crecí libre cual jabalí de monte; no me obligaron ni a ser católico, ni a estudiar alguna profesión para aliviar frustraciones familiares. Lo único que me pidió mi madre es que fuera una buena persona (una noble bestia). Ahora bien, al igual que el Tío Paco, también arrastro pecados que de vez en vez me recuerdan que nada es suficiente, y no me relajo y redoblo mis esfuerzos por seguir tratando de ser Hugo, sin más, y comparto con los otros (bendita otredad) los mundos que me habitan. Trato de vivir, a mi manera, desde la construcción.

Benito Taibo narra con genuina frescura la historia de Sebastián, un adolescente que es todo lo que lee, menos una persona normal. Inevitablemente lo asocio con mi hijo, quien pronto cumplirá once años. Es lector de sagas aunque le interesa también la ciencia. Hace poco le obsequié un libro de bolsillo titulado "¿Podemos viajar en el tiempo?" Le heredaré dos hileras de textos sobre divulgación científica, junto con el resto de los libros de mi biblioteca. Realizaré de alguna manera lo hecho por el Tío Paco con Sebastián; igual que lo hicieron mis tíos conmigo el siglo pasado, construyendo desde entonces mi acervo literario, desde la adolescencia hasta hoy.

¿Y por qué lees? Me preguntan los que no leen. Les contesto entonces lo dicho por Gabriel Zaid: "si leer no sirve para ser más reales, ¿para qué demonios sirve?" O lo dicho por Gianni Rodari: "Todo el uso de las palabras para todos, no para que todos sean artistas, sino para que nadie sea esclavo". En resumen, leer y escribir no para obtener el poder, sino para contestarle al poder, responderle, cuestionarle lo que considera "correcto". Leer también, en lo particular, me acompaña y hace más llevadero mi camino hacia la muerte, donde me espero.

Benito Taibo / Foto: Roberto Uriel Torres

Benito Taibo. Es escritor, periodista, entusiasta promotor de la lectura entre los jóvenes y actual director de Radio UNAM. Inició su camino en la literatura como poeta con Siete primeros poemas (1976), Vivos y suicidas (1978), Recetas para el desastre (1987) y De la función social de las gitanas (2002). Ha publicado en Planeta sus novelas Polvo (2010), Persona normal (2011), Querido Escorpión (2013), Desde mi muro (2014), Cómplices (2015) y Corazonadas (2016). 

Dice la contraportada: Tenía un par de padres divertidos y jóvenes, llenos de sueños y de planes. Pero a mis doce años, cinco meses, tres días y dos horas y cuarto, aproximadamente, me quedé sin ellos... Desde que el tío Paco se hizo cargo de él, Sebastián ha vivido aventuras increíbles: tuvo un encuentro inesperado con un enorme felino, conoció a uno de los últimos vampiros que viven en el DF; frente a su casa vio a un mítico personaje saltar de la góndola en la que viajaba, para rescatar a una joven de una inundación; consiguió un mapa estelar para un pobre extraterrestre perdido en la Tierra, sobrevivió el embate de un enorme monstruo marino, peleó al lado de los sioux para defender su territorio de los colonizadores? ¿Qué pasa con Sebastián? ¿Acaso no es una «persona normal»?




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