lunes, 25 de noviembre de 2019

Telesecundaria 540 "Tierra y Libertad" (segunda parte de muchas) / Simojovel de Allende, Chiapas.



El día de ayer recibí la noticia de que la Telesecundaria 540 "Tierra y Libertad" (Simojovel), de quienes les conté en este blog, festejó el Día Nacional del Libro. Fueron 145 alumnos los que participaron de esta actividad donde se hicieron dinámicas, se contó cuentos a través de un Kamishibai elaborado por los mismos maestros, y se obsequió libros A TODOS, ¿por qué? Porque es su derecho. 


Esta noticia es de las pocas que me llegan después de dar taller de fomento a docentes y directivos, estrategias que deseamos se repliquen después con los alumnos. Acá se demuestra que no basta con tener buenas ideas, sino que además esas ideas nos deben de importar, porque si no nos importa a nosotros, menos le importará a los demás. No cabe la menos duda de que leer es el camino.


Fue complicado elegir entre las más de doscientas sesenta y tantas fotos enviadas por el director de la escuela, el maestro Gilberto Francisco Vázquez Domínguez, quien nos enteró de que es la primera vez que las y los estudiantes recibían de regalo un libro, obsequio que les agradó bastante. Se les dio un paquete de libros a los equipos concursantes de las dinámicas, y un libro al resto del plantel.


¿Y por qué se festeja a los libros en noviembre? El Día Nacional del Libro nació por decreto presidencial el 6 de noviembre de 1979 durante el gobierno de José López Portillo. Por tal motivo, en dicha disposición se estableció que el 12 de noviembre de cada año —fecha elegida en honor al natalicio de sor Juana Inés de la Cruz— la Secretaria de Educación Pública (SEP), los estados y municipios...


mexicanos, las diversas instituciones educativas y culturales, así como editoriales y organismos gubernamentales, realizaran y difundieran actividades culturales,  promocionando el hábito de la buena lectura, y que brindaran el espacio para exaltar la importancia del libro como aliado del enriquecimiento y desarrollo cultural y educativo en México.


De tal forma, el 12 de noviembre de 1980 se celebró por primera vez el Día Nacional del Libro. Por otra parte, Sor Juana Inés de la Cruz. Obras escogidas se convierte en el primer libro editado con el propósito de abrir esta conmemoración. Los libros conmemorativos son ediciones no venales y se regalan en distintos puntos como librerías, bibliotecas o centros de cultura de todo el país. 


Ha sido la  Asociación Nacional del Libro, A. C. la encargada de publicar año con año un volumen antológico del autor homenajeado. El consejo directivo de la A.N.L. A.C. está conformado por: Ángeles Aguilar Zinser, Alejandra Canales Ucha, Aldo Falabella Tucci, Arturo Luis Pérez Courtarde, Carlos Anaya Rosique, Eduardo Mateos Gay, Gain Carlo Corte Truffello, Héctor Cordero Popoca, Javier Fuentes Echeverría, Jorge Flores Suari, José Luis Rosas Rivero, Juan Luis Arzoz Arbide, Ramón Sordo Porrúa, Victórico Albores Santiago y  Wilfirdo Rincón Arredondo. 


En esta fecha se busca trasmitir la importancia de la lectura y del fácil acceso a los libros en beneficio de la sociedad. Para ello, se organizan diversas actividades para acercar al público tanto a la literatura en español como en lenguas indígenas. Además,  se brinda el espacio para conocer propuestas artísticas, musicales, de artes visuales y obras de teatro, tanto de la literatura clásica como contemporánea en México.


El Día Nacional del Libro es un evento que pretende llevar la literatura a las calles, plazas públicas, hospitales, parques y bibliotecas. Durante su conmemoración se realizan talleres de fomento a la lectura, charlas de literatura infantil y juvenil, jornadas de creación literaria, simposios, lecturas en voz alta, presentación de libros, proyección de películas y documentales y conferencias.


Aunado con esta celebración, en el marco de la Feria Internacional de Literatura Infantil y Juvenil (FILIJ), cada año se rinde homenaje a un escritor mexicano cuya obra y trayectoria son pieza importante en la historia literaria en México, aunque parece que este 2019 será la última vez que dicha distinción se realice. (fuente: Enciclopedia de Literatura en México)


Lo sucedido en Simojovel, en particular en la Telesecundaria 540 "Tierra y Libertad", me llena de gusto y me anima. Ojalá de a poco se vayan articulando más actividades derivadas de los talleres de Fomento a la Lectura, el Libro y Formación de Promotores de Lectura, realizado por la Dirección de la Red Estatal de Bibliotecas Públicas, del estado de Chiapas.


Ojalá logremos vincular las demás actividades de fomento que se realizan al interior de nuestro estado, porque de verdad son bastantes los mediadores independientes y adscritos al PNSL, aunque la primera línea del fomento siguen siendo los profesores. Este es uno de los propósitos de la Estrategia Nacional de Lectura y del Consejo Estatal de Fomento a la Lectura y la Creación Literaria de Chiapas.


Los coordinadores de tan dichosa actividad fueron la profesora María Gabriela Nucamendi Serrano y el profesor Gilberto Francisco Vázquez Domínguez, además de los profesores Manuel de Jesús Martínez de la Cruz, Uriam Mancilla Ocaña y Dora Rosalba Sánchez Sánchez. A todos ellos les abrazo desde acá hasta allá, donde el zats (no digo nombre del árbol donde lo hallan, para evitar chacotas) y el ámbar.


Las fotografías que ilustran esta publicación son cortesía del director de la escuela, el maestro Gilberto Francisco Vázquez Domínguez. Ojalá y siga el ánimo porque aún falta terminar de acondicionar la biblioteca, para que los estudiantes y población en general la hagan suya... Por mejores lectores y escritores.

























jueves, 21 de noviembre de 2019

¡Abrapalabra! / Casa de la Cultura de La Trinitaria, Chiapas.


  Envíos

Todo lo que se da llega a destiempo.
           No existe otra manera.
Entre el ojo y la mano hay un abismo.
Entre el quiero y el puedo hay un ahogado.
Un país que asoma su cabeza deforme en una
           carta,
y va a darse a destiempo, nada es lo que
           esperabas.
Y lo que llega envuelto en papel de regalo se irá
           sucio de odio.

Bailamos entre los escombros de una cita.
Dibujamos una taza de café en el desierto.
Vivimos de sumar y de restar:
lo que te da el amor, lo que te quita el miedo.
Al final nos entregan los huesos de un perfume.

Aún así persistimos.
En alguna montaña vive un pez resbaloso.
Entre números rotos se desliza una estrella.

Jorge Boccanera


Cierta es aquella frase que dice: "El asesino siempre vuelve al lugar del crimen". Tal es mi caso, les cuento. El pasado 19 de noviembre me apersoné de nueva cuenta en la casa de la cultura "Antelmo Figueroa Pulido", en La Trinitaria. La vez anterior, invitado por mi querido maestro Ramón Preocupón, capacitando de manera lúdica a futuros mediadores de salas de lectura en la región, junto con mi cunca Julissa.


Con el corazón hecho un resorte (benditas metáforas) me sumé al encuentro regional y estatal de Centros Culturales y Casas de Cultura, en particular al Taller Regional de Capacitación "La fiesta creativa, dialogo interior", dirigido a los instructores artísticos culturales de las casas de cultura, esfuerzo coordinado por el maestro tovarich Óscar León (león de leer y león de fiera).


Antes de marearlos con el choro mareador al estilo de YoMeroMaromero (sí, extrañé a mi cunca en este trance talleril), les cuento quién fue don Antelmo Figueroa Pulido. Nace en la Trinitaria, Chiapas, antes Zapaluta, el 25 de mayo de 1887, fue aficionado a la lectura, de donde obtuvo una cultura más que sobresaliente, invitando después al pueblo a que leyera. 


Para tal fin llevaba libros a las casas de los pobladores y luego los recogía para llevarles a otras. Una suerte de préstamo a domicilio pero de manera literal. Por estas acciones el pueblo lo elige presidente municipal (1943-1944). Fue bibliotecario. En Tuxtla Gutiérrez, cuando era administrador de correos, escribe sus novelas y ensayos (¿a lo Rulfo?) que deja como legado histórico.


Luego de una presentación sencilla (a más de uno lo había visto dos veces en menos de un mes) les conté de qué va la Estrategia Nacional de Lectura, de sus esfuerzos por articular el gran trabajo que se realiza al interior del país y del estado, tanto en bibliotecas públicas como escolares, además de salas de lectura, paralibros y esfuerzos independientes como el de las colmenas de lectura.


Les conté también del largo camino recorrido por mí hasta esa mañana, de la consigna Tierra y Libertad, nombre del pueblo de mi familia materna. De la cabeza de Zapata en lugar de la cabeza de Ricardo Flores Magón, autor de la consigna. De la secundaria del mismo nombre (RFM), donde estudié, del apellido de mi padre, igual al del campesino y profesor rebelde, Otilio Montaño, amigo de Zapata, quien lo fusiló después. 


Para contarles todo eso dispuse de 22 consonantes y 5 vocales, lo demás fue pura técnica... chisme pué. Les dije que no sólo estamos hechos de historias sino también de letras. Que no era tan complicado apropiarse de ellas, y que además era su derecho el tener acceso a todas las palabras y utilizarlas como quisieran. ¿Para qué sirve leer entonces? ¡Para contestarle al poder!


Trabajamos Abrapalabras a través de estrategias de escritura experimental. Ensayamos oraciones con sentido, que no repitieran ninguna consonante ni vocal (debía tener las cinco), y que juntas debían de sumar 13 letras. Y lo logramos, porque el logro de uno es también de todos. Nadie es nadie solo. Después nos liamos con los palíndromos, haciendo trabajar las neuronas.


Posteriormente nos pusimos a recordar metáforas, reflexionando la importancia que tienen estas en el aprendizaje de los niñas y las niños y después en la vida adulta, en su poder de síntesis para adquirir conocimientos. Nos pusimos a recordar refranes que se explicaban después, haciendo pensar a más de uno, y de cómo algunos refranes aún se seguían usando en la familia y comunidad.


Decidimos parafrasear dichos y refranes en sus palabras clave, sustituyéndolas por las palabras: libro/s, leer, lectura/s, historias, cuentos, poesía, saberes, hablar, ignorancia, hojas, lectores, letras, entre otras más. Por ejemplo: 

Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente, quedaría así: 

Lector que se duerme, se lo lleva la ignorancia (aportación de uno de los compañeros).  


¿Y si esas refranes intervenidos se escribieran en las paredes de las bibliotecas, salas de lectura, casas de la cultura y centros culturales? ¡Uyuyuy! ¿Y si tuvieran formas caprichosas? ¿Y si crecieran del suelo y se treparan por paredes y techo? No quisimos esperar más y ensayamos sobre hojas los textos resignificados, cual si fueran muros, diseñando lo que nos gustaría escribir. 


Después nos transformamos en diccionarios humanos y escribimos las definiciones de cuatro palabras jamas leídas antes. Cuatro palabras que de seguro se hallan en libros de alguna especialidad, de las muchas ramas de la ciencia, en su sentido más amplio. Entre ellas coloqué las definiciones correctas, pero fueron otras las definiciones ganadoras. ¡Una chulada!


Cerramos con palabras encadenadas en un Mondongo (el fantasma de la ORMIGA comenzó a rondarnos), una manera divertida de aprender ortografía jugando. Lejos estaba de imaginar el error que iba a cometer por una mala decisión, acorralado por el cansancio y los principios en los que se sustenta el fomento de la lectura. 

De nuevo mil disculpas a todos aquellos a los que metí en un lío, sin desearlo. Disculpas también al camarada tovarich, pero sucede que a veces yo también me canso de ser yo. Ahora mismo estoy recargando la pila, descansando, no tengo necesidad de nada más. El fomento a la lectura lo hice, lo hago y lo seguiré haciendo por muchos años, desde donde yo vengo.

Las fotos son cortesía de Quique y YoMeroMaromero... Por mejores lectoescritores.