Continuando con las actividades a realizar para la celebración del día internacoonal del libro y de los derechos de autor, el Colegio de Estudios Científicos y Tecnológicos del Estado de Chiapas, Plantel 01 San Fernando (San Fernando, Chiapas) la licenciada Ana Lilia de Jesús López Pérez, titular de la asignatura de Lectura, Expresión Oral y Escrita II, me invitó a las actividades programadas por dicho Plantel, para dar una charla entorno a la importancia de la lectura a estudiantes de segundo semestre, de los diferentes grupos de ese plantel.
Hice de nuevo la referencia al porqué del día, de la historia del libro y de la rosa, y de los decesos de Cervantes y Shakespeare, y del tremendo lío que se tienen con eso de los calendarios antiguos y modernos. Los más de ciento cincuenta asistentes mostraron interés por la actividad que ahí se realizaba, y aproveché para contarles cómo un libro viene a representar la "memoria" de la humanidad... aunque es bien sabido que las memorias se venden ahora en cualquier supermercado, crucero, y los más afortunados las hallan conectadas a una computadora en algún cibercafé de la ciudad.
Pregunté quién había escrito la Iliada y la Odisea, a lo que algunos contestaron "Homero"... y bueno, tuve que contarles que el buen Homero era ciego, así que imaginaba lo complicado que era escribir en esas condiciones, además, la obra apareció registrada en un libro trecientos años después de Homero. ¿Qué era un libro entonces? Un oficio de verdadera vocación. Se hacían a mano de cabo a rabo, y es por eso que un libro era considerado un "tesoro", por la dedicación y esfuerzo empleado en su creación.
Luego vino la imprenta y la producción en serie que tampoco eran las cantidades que hoy día circulan en el mundo. Imaginemos un título, que tendrá una reproducción mínima de mil ejemplares... y si multiplicamos esos miles por los millones de títulos existentes en el mundo, tendremos cantidades de miles de millones que se hacen prácticamente incontables... y si a eso le sumanos la producción en línea, para quienes gustan leer en la computadora, es casi alucinante.
Fue inevitable hacer una breve reseña de cómo me interesé en los libros, que no fue algo más que intuitivo, tal vez porque ya sabía leer, y bueno, los recuerdo son más de laboriosa búsqueda que de gozosa experiencia... no sé si he sentido eso llamado gozo, pero de que me he maravillado de vez en vez eso ni duda cabe. Y que ese hábito lector logró despertar la curiosidad en mí, en temas que no son del gusto de chicos de la edad de quienes esa mañana asistieron a la charla: la fotografía, la astronomía, la escritura y la lectura en sí, además de la música. Expliqué que no quería decir que ellos no fueran lectores, o interesados en temas específicos, al contrario, eran lectores todo el tiempo: somos lectores de tiempo completo, pero no estamos atentos a ello, porque se da como parte de la vida cotidiana. La oralidad es esencial. Parte también de mi inetrés nació de las historias que oía, ya fuera de libros, películas o música... bueno, en una ocasión me contaron de un señor que pintaba girasoles y que un buen día se cortó una oreja... ¡uf!... fue inevitable buscar información del personaje... sí, tal vez me motivo el morbo, pero el fin justificó el motivo, jejeje.
Pregunté quíen tenía alguna cuenta en redes sociales, y de inmediato comentaron que eran alienados del Facebook, twitter, hotmail, gmail, whatsapp... y recién se estaban estrenando en la creación de blogs. Saberlo me dio mucho gusto, ya que en universidades donde he tenido la oportunidad de dar una charla, el uso de un blog no existe ni como herramienta de estudio. Ellos habían creado blogs para compartir lecturas, escritura, y demás asuntos relacionadas con la literatura, motivados por una solicitud de la licenciada Ana Lilia, cosa que me agradó bastante.
Les conté de cómo me inicié en eso de la promoción de la lectura sin pertenecer en un principio al programa estatal de fomento a la lectura,y de intentar ser mediador de salas de lectura del programa nacional. Y les digo que no sabía que había un área para realizar esto, y realizaba desde antes esa labor al prestar libros de mi biblioteca personal, con vecinos de la cuadra. Hoy no sólo tengo ese espacio, sino que cuento desde enero con una sala de lectura en el espacio que ocupa mi lugar de trabajo, el cuál tiene sus lectores, aunque debemos hacer un esfuerzo extra por atraer a más personas a la sala.
¿Existe resistencia a la lectura? Creo que no... lo que existe es falta de hábito... al final de cuentas el primer derecho que tiene un lector es a NO LEER. Jamás será una obligación, como mencionan agudos especialistas (y colegas) a la hora de hablar sobre asuntos relacionados con el bajo índice de lectores en nuestro país.
Por último leí algunos textos de mi "cosecha" y regalé tres libros, cerrando la charla con la recomendación de acercarse a la literatura, a los cuentos, la poesía o novelas, cuando ellos quieran. De antemano les prometí viajes extraordinarios a través de los libros, personajes entrañables, y descubrimientos personales que de a poco les irían moldeando la personalidad.
Se buscan mejores lectores, de eso no me cabe la menor duda. Insisto: Lectores somos todos.
ACTIVIDAD: DÍA INTERNACIONAL DEL LIBRO Y DE LOS DERECHOS DE AUTOR.
LUGAR: COLEGIO DE ESTUDIOS CIENTÍFICOS Y TECNOLÓGICOS DEL ESTADO DE CHIAPAS
FECHA: 02 DE MAYO DE 2013.
HORARIO: 10 horas.
